Danza de sombras en un día soleado


Se yerguen en el egoísmo
las manos arpías surcando la pared
ya sin estuco, de humedad desmoronándose.

Ese olor, el olor nauseabundo
impregnando las sábanas
de fuego ausente y estrepitosa bocanada.

La sonrisa común que todo confunde
Ha venido a desencadenar la furia de la duda
Como los zorros de bello pelaje
Se han quedado las sensaciones en el relieve de sombras.

Fue la sal y no el bálsamo en las heridas
Ciegas, mudas mas no sordas
Porque no se han hartado de escuchar tu respiración,
Hálito que todo lo pudre
Y remoja en el retrete vomitado
De una romántica canción.

Festejo hoy eso que llamas felicidad
Lo más parecido a permanecer lejos de mi
La otrora castrante y constrictora creación caótica.

Puedo ver en tu historieta
Arremolinarse los corazones
A los pajes diseñando un camino de flores
Y  han dejado, para infortunio tuyo
las espinas diseminadas en el tiempo
rogando su impuntualidad a un latido.

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