A la sombra de la luna





El espacio nocturno de dos cuerpos
una duna las estrellas
tímidas en el oscuro
y resplandeciente blanco
de la cresta de las nubes
su calidez en la orilla de tus labios
el delfín acompañando una barcaza de besos,
en los brazos de la brisa
tu respiración
susurraba el deseo
de reflejarme en tus ojos
lunar espejo.
Tú todas las Pléyades
es nuestro su andar de ola
de mar calmo y embravecido
tras el abrazo de sal y arena
al despejarse el cielo sin luna
en el pensamiento te recuerdo
perdidos en la piel de nuestra playa

que hoy como siempre nos espera.

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